EBIORO UAB: La empresa Cubano-Lituana de Criptomonedas

The image illustrates the intersection of finance and cryptocurrency. A golden Bitcoin stands prominently in the foreground, symbolizing the rise of digital currency.

El régimen cubano ha dado un paso hacia la integración de las criptomonedas en la economía al otorgar una licencia a EBIORO UAB, una empresa registrada en Lituania, casualmente fundada y dirigida por un cubano.

La decisión, publicada en la Gaceta Oficial de la República de Cuba, levanta interrogantes sobre el papel que jugarán los activos digitales en nuestro país donde el acceso a las finanzas internacionales se ha visto cada vez más restringido.

El Cubano

Aunque el gobierno cubano ha presentado a EBIORO UAB como una “empresa de nacionalidad lituana”, la compañía fue fundada por Yulexi Matienzo Carcasés, un cubano graduado de la CUJAE y la Delft University of Technology en Países Bajos. Según la plataforma Okredo, Matienzo Carcasés figura como director de la empresa, que cuenta con un capital de 148,630 euros.

La historia de EBIORO UAB se remonta a 2016, cuando Matienzo comenzó a desarrollar su plataforma con la idea de reducir los costos de las transacciones a Cuba mediante la tecnología blockchain.

En 2019, anunció públicamente su proyecto, destacando que su aplicación permitía a los cubanos en el exterior comprar criptomonedas con tarjetas de crédito y enviar transferencias en cuestión de segundos a familiares en la isla.

Además de su vinculación con EBIORO, Matienzo Carcasés aparece asociado a Sasa Holding BV, una empresa de Países Bajos dedicada a los holdings financieros y registrada en la Cámara de Comercio desde 2018.

EBIORO UAB

La licencia otorgada a EBIORO UAB le permite operar como proveedor de servicios de activos virtuales, desarrollando actividades como:

• Operaciones de cambio de criptomonedas.

• Gestión de plataformas digitales para pagos y transferencias.

• Custodia y administración de activos virtuales.

• Creación y administración de monederos digitales y cuentas en plataformas de servicios financieros.

Este movimiento se produce en un contexto de crisis económica y restricciones financieras, en el que el régimen cubano busca alternativas para captar divisas ante el cierre de otras vías de ingreso, como el sistema de remesas tradicional.

¿Solución o maniobra del régimen?

Desde 2022, el Banco Central de Cuba (BCC) había anunciado su intención de regular y otorgar licencias para el uso de criptomonedas en la isla. Sin embargo, el economista Pedro Monreal ha advertido que estas estrategias no solucionan el problema estructural del país, basado en un modelo económico fallido y en la falta de productividad real.

El uso de criptomonedas en Cuba ha generado tanto expectativas como preocupaciones. Mientras algunos lo ven como una forma de esquivar sanciones y facilitar transacciones, otros advierten sobre los riesgos de manipulación estatal, lavado de dinero y falta de transparencia en un ecosistema controlado por el régimen.

Aún no está claro desde cuándo EBIORO UAB ha estado en negociaciones con el gobierno cubano para obtener su licencia, ni si su fundador mantiene algún tipo de vínculo con funcionarios estatales. Lo que sí es evidente es que, en un país donde el control financiero es una herramienta de poder, la introducción de las criptomonedas no será simplemente un paso hacia la modernización, sino también una jugada estratégica del régimen para controlar y canalizar los recursos financieros que fluyen desde el exterior.

Lo cierto es que, en un país donde la opacidad financiera y la falta de libertades económicas han sido la norma, cualquier nuevo mecanismo de pago debe analizarse con cautela. Mientras tanto, el pueblo cubano sigue buscando vías para sortear las restricciones y encontrar una salida a la asfixiante crisis económica que los golpea día a día.

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