Cuba ha perdido a una de sus voces más emblemáticas. Paulo Fernández Gallo, conocido como Paulo FG, falleció este sábado en un trágico accidente de tránsito en el Malecón de La Habana, dejando un vacío irreparable en la música cubana.
El accidente, que rápidamente se viralizó en redes sociales con imágenes impactantes del vehículo destrozado, fue confirmado por la televisión estatal cubana. Según reportes preliminares, el auto en el que viajaba el cantante de 63 años colisionó con un ómnibus de Transtur en la intersección de la calle 12 y la 3ra avenida, ya en el Malecón.
Paulo FG no solo fue un artista excepcional, sino un ícono de la música popular bailable durante más de cuatro décadas. Su carrera comenzó en agrupaciones legendarias como Adalberto Álvarez y su Son, Opus 13 y Dan Den, pero alcanzó su máximo esplendor cuando fundó su propia banda, La Élite, en 1992. Con una voz inconfundible y un carisma arrollador, llevó la salsa cubana a un nuevo nivel, fusionándola con géneros como el jazz, el rock y la balada.
Canciones como “El bueno soy yo”, “Te deseo suerte”, “Con la conciencia tranquila” e “Ilusión” marcaron generaciones y consolidaron su legado en la historia de la música cubana. Su influencia trascendió fronteras, llegando a más de 20 países y siendo versionado por estrellas de la salsa neoyorquina y puertorriqueña.
No es la primera vez que un accidente de tránsito cobra la vida de una figura importante en Cuba, y las cifras de siniestros continúan en aumento. Paulo FG será recordado como un gigante de la música.
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