La Federación Cubana de Béisbol (FCB) anunció la destitución de Armando Johnson como director del equipo nacional tras los malos resultados en competiciones internacionales. La decisión se produce después del fracaso en el Premier 12 de 2024, donde Cuba terminó en el último lugar, consolidando una etapa marcada por la inconsistencia y la falta de resultados.
Johnson, quien asumió el mando en 2022, llegó en un momento complicado para el béisbol cubano, en medio de una crisis estructural y una constante fuga de talentos. Su debut fue en la Copa del Caribe de ese mismo año, donde no consiguió el campeonato. Sin embargo, su mayor logro fue llevar a Cuba a las semifinales del Clásico Mundial de 2023, gracias a la incorporación de jugadores de Grandes Ligas, alcanzando un meritorio cuarto puesto. Luego, el equipo logró la plata en los Juegos Centroamericanos y del Caribe y ganó la Copa del Caribe en Puerto Rico. No obstante, la caída fue abrupta en los Juegos Panamericanos de Santiago de Chile, donde la selección quedó eliminada tras derrotas ante Venezuela y Brasil.
El Premier 12 de 2024 fue el golpe final para Johnson. Con solo una victoria en cinco juegos, Cuba terminó en el fondo de la tabla junto a Puerto Rico, lo que selló su salida. Además, en el último año su liderazgo se había debilitado debido a problemas de salud y situaciones personales.
Más allá de los resultados en el terreno, la crisis del béisbol cubano va mucho más allá de un cambio de manager. La falta de inversión, la ausencia de un sistema moderno de desarrollo de talentos y la continua emigración de jugadores han dejado al equipo nacional sin la competitividad que lo caracterizó en el pasado.
La decisión de la FCB ha sido criticada por especialistas y aficionados, quienes ven la destitución de Johnson como una maniobra para desviar la atención de problemas más profundos. La falta de infraestructura, la crisis de la Serie Nacional y la ineficacia del sistema de reclutamiento siguen siendo los principales obstáculos para el resurgir del béisbol en la isla.
Aún no se ha anunciado quién tomará el relevo, pero ya se especula con nombres como Alfonso Urquiola, Rey Vicente Anglada, Noelvis González y Michel Enríquez. Sin embargo, más allá del nuevo estratega, lo que realmente determinará el futuro del béisbol cubano será la voluntad de la FCB de implementar cambios estructurales. Sin una transformación real del sistema, cualquier nuevo nombramiento solo será un parche en una crisis que parece lejos de resolverse.
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